Ficus carica L.
Caprificus insectifera Gasparr., F. carica var. caprificus auct., F. carica var. sylvestris auct., F carica subsp. rupestris (Boiss.) Browicz, F. carica var. rupestris Boiss.
Esp.: Higuera, cabrahigo. Fra.: Figuier commun, caprifiguier. Ing.: Common fig. Ara. (higuera hembra o cultivada): Kerma, kermaya, karam, teen, azar, lemdja, (higuera macho o silvestre): dokkar, (frutos): kermus, kartoss. Tam.: (higuera macho o silvestre): Tadukkart guirzer, (higuera hembra o cultivada): tin, taguerurt, tanaglet, tar’lith, tamazate, tamehit, tazart, tahart, azart, ahaï, (frutos): bakhis, emohi.
Arbusto o pequeño árbol caducifolio, monoico, de hasta 6(10) m de altura. Porte muy abierto, con copa anchamente redondeada. Tronco tortuoso, con corteza grisáceo-blanquecina, áspera, poco o nada agrietada salvo en la base de los ejemplares muy viejos. Ramas extendidas o extendido-erguidas, con frecuencia por su propio peso caen al suelo, haciéndose rastreras. Corteza de las ramas viejas del mismo color que la del tronco, aunque un poco menos áspera; la de las ramas más jóvenes es verdosa, áspera, con pelos cortos. Hojas caducas, alternas, grandes, de 10-35 × 8-28 cm, de forma variable pero más o menos profundamente palmeadas, con lóbulos enteros o poco divididos, raramente aparecen hojas casi enteras o incluso enteras (deltoideas); base generalmente un poco cordiforme, lóbulos obtusos o raramente subagudos, margen ondulado con dientes obtusos; haz de color verde oscuro, rugoso, áspero, con pelos subcónicos cortos; envés glauco, más claro y menos áspero, con pelos similares. Pecíolo largo (2-10 cm), peloso o pulverulento. Ramas y hojas producen un látex blanquecino, acre e irritante. Flores masculinas y femeninas diminutas (1,5-2,5 mm de largas), con una sola envoltura compuesta por 5 piezas lineal-lanceoladas; encerradas en el interior de un receptáculo engrosado en forma de pera, con un poro en el ápice, que procede de un pedúnculo corto y grueso que se ha ensanchado e invaginado; las masculinas, con 3 estambres -más largos que el perianto-, se sitúan por encima de las femeninas, que se muestran unas con el ovario bien desarrollado y otras con el ovario atrofiado, estériles. En el interior de este receptáculo es donde una avispa procede a la polinización o “caprificación”. Los frutos son un conjunto de diminutos aquenios encerrados en un sicono o «higo», procedente del receptáculo acrescente y carnoso, piriforme, primero verde y más o menos erguido, al madurar de verde a purpúreo-negruzco y colgante hasta que cae al suelo. 2n=26.
Floración:
marzo-junio.
Fructificación:
En primavera y verano madura una primera tanda de frutos, las brevas, que son los siconos apicales que maduran por partenogénesis carpelar. Más tarde, a finalesdel verano y principios de otoño madura una segunda tanda, los higos, que son los siconos cuyas flores femeninas fueron polinizadas en primavera.
Hábitat:
Todo tipo de terrenos, con suelos profundos o raquíticos, con frecuencia en roquedos e incluso en muros artificiales, desde el nivel del mar hasta la media montaña. Bioclima de semiárido a subhúmedo, pisos del inframediterráneo al mesomediterráneo.
Distribución:
Europa meridional, Asia centro-occidental y N de África. Su origen se sitúa en la región mediterránea, pero cultivada y naturalizada se halla ampliamente distribuida por otras regiones del mundo.
Observaciones:
Tanto las poblaciones silvestres como las cultivadas presentan ejemplares funcionalmente masculinos, con flores masculinas y flores femeninas brevistilas (“higuera silvestre”, higos de Capri o cabrahigos) y funcionalmente femeninos, con flores femeninas longistilas (“higuera común o cultivada”, higos de Esmirna). Han evolucionado así, en simbiosis, con las avispas del género Blastophaga que realizan la puesta de sus huevos en las flores femeninas y en el proceso polinizan a las flores pistiladas. Como el polen viene de los higos de los pies masculinos, los cabrahigos, a esta fecundación se la conoce como caprificación. En realidad las diferencias entre cabrahigos e higueras son las propias de una especie que ha coevolucionado con los citados himenópteros. No se trata pues de especies ni subespecies diferentes como se ha venido repitiendo desde hace siglos tanto entre las gentes del campo como entre botánicos, que han pretendido ver en el cabrahigo un taxon diferente y silvestre.
Actualmente, en los cultivos para la producción intensiva de higos, los árboles son partenocárpicos, es decir, que sus flores no necesitan ya que las avispas fecunden las flores femeninas para producir frutos.
Estado de conservación:
Especie común y de amplia distribución, no parece amenazada. En la Lista Roja de Especies de la UICN ha sido catalogada como Preocupación Menor (LC) a nivel global (Participantes del FFI/IUCN SSC Central Asian regional tree Red Listing workshop, 2007). En la Lista Roja de las plantas vasculares de Egipto (Flora Aegyptiaca Vol 1, 2000), se ha incluido como “Amenazada”.